¿Usted qué piensa sobre los inmigrantes que aún no tienen un estatus pero que han sido arrestados por andar manejando tomados? O quizás no por andar tomado, pero sí por robo o algún cargo de violencia o incluso por un fraude. ¿Considera que deben ser prioridad de deportación o que merecen una segunda oportunidad? ¿Le parecería justo que alguien que ha infraccionado la ley por alguno de estos cargos y aún así consiguiendo la residencia? Este es un tema bastante delicado porque, hasta la fecha muchos viven con el miedo a ser deportados, intentan evitar romper las leyes para no ser deportados.
El día de ayer salió una noticia en donde se anunció que nuestro presidente Biden serán frenadas las deportaciones por los cargos antes mencionados, y así poderse enfocar realmente en los casos que son realmente de riesgo; como los asesinatos, secuestros o violaciones, en las que ya se convierten en cargos de mayores ante la ley.
Jen Psaki, quien es la secretaria de prensa comentó a los medios que se informaría a las aduanas de los EE.UU.A que deberían cambiar su enfoque de lo que son los inmigrantes ilegales a los que se deberían reportar, según el The New York Post, estas fueron sus palabras: “La prioridad para la aplicación de las leyes de inmigración estará en aquellos que representan una amenaza para la seguridad nacional, por supuesto, una amenaza para la seguridad pública y los recién llegados”, dijo Psaki en una sesión informativa el lunes por la tarde.
Buscan hacer un cambio en la seguridad y el enfoque de las autoridades, lo que tiene mucho sentido, ya que así se podrán enfocar muchísimo más en los casos más serios, aquellos que amenazan la seguridad local y nacional, ya sea de los habitantes actuales y los recién llegados. Con ello, se busca generar un país mucho más justo y, sobre todo, seguro.
Ahora bien, esto no es todo, Biden considera que las reformas migratorias actuales se han quedado obsoletas y que por ello es necesario generar un cambio que busque las mejoras de la ciudadanía. Esta nueva reforma migratoria busca brindar a más de 11 millones de indocumentados un camino más justo hacia la ciudadanía.
Y ya por último, pero no menos importante, el secretario de Estado anunció el sábado que el gobierno de Biden había comenzado a suspender los acuerdos migratorios de la era Trump con El Salvador, Guatemala y Honduras, limitando la capacidad de los solicitantes de asilo de esos países para ingresar a Estados Unidos.
“De acuerdo con la visión del presidente, hemos notificado a los gobiernos de El Salvador, Guatemala y Honduras que Estados Unidos está tomando esta medida a medida que comienzan los esfuerzos para establecer un enfoque cooperativo y de respeto mutuo para gestionar la migración en toda la región”, dijo Blinken en una oración.
Esto nos da un poco de esperanza de que las cosas van a mejorar, de que este presidente si buscará cumplir con lo que ha prometido en campaña, pero por ahora, solo nos queda esperar a que poco a poco todo se vaya acomodando.