¿Freno a las deportaciones? Desde su regreso a la Casa Blanca, Donald Trump ha estado implementando, en líneas generales, lo que prometió durante su campaña en materia de inmigración. No hay sorpresa en esto; era lo que se esperaba. Una de esas promesas de campaña era la implementación de un plan de deportaciones masivas.
Desde el 20 de enero, cuando asumió su segundo mandato, se reactivaron las redadas, las detenciones y las deportaciones, manteniendo en vilo a distintos grupos de inmigrantes, con especial atención en la comunidad venezolana.
En este contexto, una decisión de la Corte Suprema de Justicia se presenta como un posible freno.
La Corte Suprema y las deportaciones
Parecería que las noticias en materia migratoria y deportaciones han sido mayormente desalentadoras, pero esta acción de la Corte Suprema, la instancia judicial más alta de la nación, se vislumbra como una decisión positiva. Ofrece una señal de esperanza de que, en el futuro, las políticas migratorias no se vuelvan tan extremas, dado el temor que muchas personas sienten ante las medidas implementadas por esta administración.
Es una decisión histórica, aunque sea interina, momentánea y temporal. La pregunta que surge es: ¿Por qué la Corte Suprema actuó con tanta rapidez y urgencia para bloquear las deportaciones bajo la administración de Trump?.
La Corte Suprema, máximo tribunal del país, lo que está haciendo es enviar un claro mensaje al presidente Trump: “Espérate tantito”. La Corte reafirma su rol como uno de los poderes más importantes en la interpretación de lo que es legal y lo que no lo es, sugiriendo que la administración actual podría estar extralimitándose en sus funciones. ¿Qué fue lo que aconteció? ¿Por qué la decisión se dio a conocer en la madrugada del sábado 19 de abril, a la 1 de la mañana?
La importancia del fallo de la Corte Suprema
La Corte Suprema demostró la urgencia que le imprimió a este asunto al emitir su decisión a esa hora inusual. La orden de emergencia emitida por la Corte Suprema a la 1 de la mañana ordenó al gobierno federal detener la deportación de un grupo específico de inmigrantes. Más precisamente, se frenaron, al menos momentáneamente, las deportaciones de inmigrantes venezolanos que se encontraban detenidos en Texas.
Aunque alguien podría pensar que esta situación sólo concierne a los venezolanos, lo cierto es que sí importa, y nos importa a todos. Si en este momento no se le pone un límite al presidente Trump en cuanto a lo que puede hacer en materia de deportaciones y lo que excede sus facultades legales, ¿quién lo hará en el futuro? Hoy son los venezolanos, pero mañana podrían ser los mexicanos, y después otros grupos.
Lee también: Nuevo ciudadano de Estados Unidos: 5 cosas que debes hacer ahora
Esta decisión de la Corte Suprema es trascendental para toda la nación, y su impacto va más allá del ámbito migratorio. Los inmigrantes venezolanos enfrentaban una deportación inmediata a El Salvador, donde serían recluidos en el CECOT, un centro de detención considerado peligroso, sin tener la oportunidad de defenderse legalmente.
Un aspecto grave es que las notificaciones de deportación que recibieron estaban redactadas completamente en inglés, a pesar de que la mayoría de ellos no dominaban el idioma, y dichas notificaciones no explicaban cómo podían apelar sus casos de deportación.
La Corte Suprema actuó en defensa propia
¿Por qué esta orden de la Corte Suprema fue tan apremiante? La celeridad de la Corte Suprema se debió a varias razones. En primer lugar, existía un riesgo inminente de que las deportaciones se llevaran a cabo en cuestión de horas. Si la Corte Suprema no intervenía de inmediato, los migrantes serían enviados fuera del país sin posibilidad de revertir la situación, especialmente considerando la postura del presidente Bukele. Por otro, la desconfianza hacia el gobierno de Trump fue otro factor determinante.
Durante meses, la Corte Suprema estuvo confiando en las promesas del Departamento de Justicia respecto de atender en detalle estos casos. Sin embargo, en éste en particular, existía evidencia sólida de que el gobierno había faltado a la verdad a los tribunales respecto a sus intenciones.

Quedó en evidencia que la Corte Suprema ya no confía en las declaraciones del presidente Trump. Además, actuó para defender su propia autoridad como el máximo intérprete de la ley en la nación.
La Corte no quiere perder autoridad
Apenas 12 días antes, la Corte Suprema había emitido una orden exigiendo que los migrantes tuvieran acceso al debido proceso legal. Ignorar esa orden habría menoscabado seriamente la autoridad de la Corte Suprema. Si permaneciera inactiva ante las acciones de la administración Trump, ignorando las órdenes de tribunales inferiores en relación con las deportaciones, su papel como contrapeso se vería comprometido.
Si la administración no respeta las decisiones de las cortes inferiores e incluso de la Corte Suprema de Justicia, entonces se corre el riesgo de tener un poder ejecutivo sin límites, similar a una monarquía donde el presidente dicta, hace, deshace y viola la ley sin que nadie pueda detenerlo.
Lee también: La Corte Suprema podría cambiar todo para los inmigrantes
Otro aspecto relevante dentro de la Corte Suprema es el cada vez mayor choque de ideologías entre los jueces. Algunos no están de acuerdo con las políticas de Trump, mientras que otros lo defienden más que nadie. Todos dicen que, tras bambalinas, se vivió un verdadero drama en la Corte Suprema.
El primer juez en recibir la solicitud para detener momentáneamente las deportaciones fue Samuel Alito. El juez Alito, de tendencia conservadora, aparentemente buscaba dilatar la decisión, lo que, dada la urgencia de la situación, podría haber significado que la administración llevara a cabo las deportaciones antes de que se emitiera la orden.
La administración podría argumentar no haber recibido la orden a tiempo, alegando que los aviones ya estaban en vuelo para llevar a cabo las deportaciones.
Ante el peligro inminente, los demás jueces de la Corte Suprema tomaron una medida inusual: le quitaron el caso al juez Alito y emitieron la orden de emergencia antes de que él se decidiera. Esto es extremadamente raro, ya que normalmente la Corte Suprema espera a que todos los jueces redacten sus opiniones.
El hecho de que la mayoría no esperara evidencia la extrema urgencia y la total desconfianza hacia el gobierno actual. Es importante decir que la Corte Suprema no le había generado problemas a esta administración… hasta ahora.
Deportaciones: el fallo de la Corte y el impacto futuro
¿Qué implica esta acción de la Corte Suprema para el futuro? La decisión podría marcar el inicio de una ruptura entre la Corte Suprema y el presidente Trump.
Hasta ahora, la mayoría de los jueces, incluso los progresistas dentro de la misma Corte, habían intentado evitar confrontaciones directas con el gobierno. Sin embargo, ante lo que se percibe como mentiras y desprecio por las órdenes judiciales, la paciencia parece haberse agotado.

La Corte Suprema está diciendo con el fallo que el Departamento de Justicia está mintiendo de forma constante, y ya no confían en sus promesas de acatar las órdenes judiciales. En estos meses, el Departamento de Justicia recibía las comunicaciones, decía que detendría las deportaciones, pero hacía lo contrario, subiendo a las personas a los aviones para llevarlas fuera del país.
Esta situación podría desencadenar decisiones mucho más estrictas contra la administración Trump y alterar el equilibrio de poder entre los tres poderes del gobierno de los Estados Unidos: el ejecutivo, el legislativo y el judicial, donde las cortes juegan un papel fundamental.
Esta no solo fue la decisión más relevante de la Corte Suprema en los últimos tiempos en materia de inmigración; su trascendencia va más allá. En realidad, la Corte Suprema le está diciendo a Trump: “Basta. Ya, hasta aquí”.
La importancia de acatar las decisiones de la Justicia
Con el fallo, la Corte Suprema está brindando al país una defensa del debido proceso legal y está protegiendo la separación de poderes, un principio fundamental que establece que nadie, ni siquiera el presidente, está por encima de la ley. En Estados Unidos, se repite constantemente la máxima de que nadie está por encima de la ley.
Precisamente por ello existen las tres ramas del poder –ejecutivo, legislativo y judicial– para que se controlen mutuamente y se asegure que ninguna de ellas exceda sus funciones. Cuando una rama comienza a extralimitarse, las otras deben intervenir para restablecer el equilibrio. La Corte Suprema está reafirmando su papel en este sistema de pesos y contrapesos, exigiendo respeto por su autoridad.
Además, como explicamos antes, la decisión no solo atañe a los venezolanos. Hoy son ellos, pero mañana podrían ser otros grupos de inmigrantes. Si la sociedad no manifiesta su desacuerdo con las acciones del presidente en materia de deportaciones, y no se apoya el freno que la Corte Suprema está intentando imponer, otros grupos podrían ser los siguientes en verse afectados.
La intervención de la Corte Suprema en este caso de deportaciones está generando un intenso debate en los medios y en la comunidad en general. ¿Actuó correctamente al intervenir tan rápidamente, o fue una reacción exagerada?

La firmeza mostrada para frenar las deportaciones y al exigir respeto por el debido proceso legal sienta un precedente importante para futuras controversias entre las ramas del gobierno. La defensa de la separación de poderes y el principio de que nadie está por encima de la ley son pilares fundamentales que la Corte ha reafirmado con esta decisión sobre las deportaciones.
Abogados de inmigración
Si tienes una situación migratoria complicada y quieres resolverla con alguien de confianza, con experiencia y paciencia, no dudes en agendar una cita con el equipo de abogados de inmigración de Erika Jurado.
¡Nos enfocamos en todo tipo de casos migratorios, incluidos los relacionados con todas las dudas que tengas respecto del asilo, deportaciones, detenciones en redadas, el parole in place, la visa U, la visa T, la visa VAWA, el DACA y la visa de prometido.
Conoce más sobre el despacho y la trayectoria de Erika Jurado Graham como abogada de inmigración en este enlace.
Aquí, toda la información sobre nuestros servicios y aquí, nuestra página dedicada a la comunidad LGTBQ.
Todos los videos de Erika Jurado Graham, en este enlace.
¡Tenemos licencia para trabajar en todos los Estados Unidos! No te pierdas nuestros videos y los artículos de nuestro blog para que siempre estés al día con lo último en noticias de inmigración y cada una de las novedades que se producen respecto del tema.
Casos complejos, atención profesional y en todas las ciudades
La abogada de inmigración Erika Jurado-Graham trabaja con el mayor profesionalismo. Sus 15 años de experiencia en la ley de inmigración y su historial de casos complejos ganados la respaldan.
Recuerda que la abogada Erika Jurado atiende casos de Visa U, Visa Vawa, Visa T y otros desde cualquier parte de Estados Unidos, no es necesario estar en la misma ciudad.
Abogados de violencia doméstica en español y en inglés con amplia experiencia. No importa dónde te encuentres, atendemos a distancia, lo que permite tener clientes en Estados Unidos, México y en toda Latinoamérica.
Con el uso de la tecnología ya no existen distancias y contratar el abogado de la esquina que tal vez no cuente con la experiencia que buscas, es cosa del pasado.
Nuestro despacho de abogados de violencia doméstica y temas de visa Vawa está capacitado y calificado para hacer tu trámite totalmente conveniente para ti, sin necesidad de salir de tu hogar. De esta forma, ahorramos tiempo y costos para ti y tu familia.