Texas, el segundo estado más poblado de Estados Unidos, finalmente promulgó la polémica ley SB4 que fue etiquetada por los medios de comunicación como la legislación antiinmigrante más severa en las últimas dos décadas.
La SB4, promulgada por el gobernador Greg Abbott, genera preocupación debido a su impacto directo en la vida de los inmigrantes, especialmente en un estado donde el 40% de la población es de origen hispano.
Antes de seguir ¿qué significa que una ley fue promulgada? Cuando una ley es promulgada, se emite una declaración oficial que confirma que ha sido aprobada y que se espera que todos los ciudadanos la cumplan. El acto de promulgación, que sigue a la aprobación del poder legislativo, es clave para el funcionamiento del sistema legal.
Como contamos en este blog, la ley SB4 fue aprobada en noviembre por el Congreso de Texas y sólo aguardaba la firma del republicano Abbott para comenzar a regir.
Desde cuándo rige la ley SB4 en Texas
Este conjunto de normativas, que entrará en vigor en marzo de 2024, endurece las políticas hacia los inmigrantes y otorga a las autoridades locales algo inédito para ellas hasta ahora: la facultad de cuestionar la situación migratoria, con posibles consecuencias para aquellos que no puedan demostrar su estatus legal.
En su discurso, Abbott justificó la necesidad de la SB4 debido a lo que él considera una “deliberada falta de acción” por parte del gobierno federal, liderado por Joe Biden.
Recordemos, Biden es demócrata y Abbott, republicano.
El gobernador argumenta que la situación actual en la frontera representa un “riesgo para la seguridad nacional” de Estados Unidos.
Abbott dijo cuando firmó la promulgación que la SB4 ayudará a contener la denominada “oleada” migratoria que ha llegado a Texas.
La ley fue aprobada por mayoría en el Congreso local.
Qué pueden esperar los migrantes en Texas
Con la nueva ley SB4, que parte de un conjunto de medidas destinadas a frenar el flujo migratorio, los cruces ilegales se convierten en un delito sujeto a penalización por parte de las autoridades estatales.
Así, policías y jueces locales podrán autorizar deportaciones, facultad que normalmente recae en instancias federales.
A pesar de los argumentos presentados por Abbott, la SB4 ha sido objeto de críticas tanto a nivel nacional como internacional.
México, país con el cual Texas comparte una extensa frontera, rechazó la ley.
La cancillería del país que gobierno Andrés Manuel López Obrador advirtió en noviembre que la criminalización de los inmigrantes podría resultar en la separación de familias, discriminación y perfilamiento racial.
Dada la considerable población de origen mexicano en Texas, estimada en 10 millones de habitantes, este rechazo diplomático podría tener más implicaciones que iremos publicando en este blog.
La ley también es motivo de análisis de los abogados de inmigración, ya que deja la puerta abierta a toda clase de reclamos.
Reacciones
Distintas organizaciones de derechos humanos han amenazado con emprender acciones legales para frenar la implementación de la SB4.
Por ejemplo, la directora de la ACLU en Texas, Oni Blair, dijo que la ley sustituye a la legislación federal y autoriza inconstitucionalmente a las autoridades locales a deportar personas sin el debido proceso, sin importar si están solicitando asilo u otras protecciones humanitarias.
Una treintena de antiguos jueces de inmigración también se manifestaron preocupados, calificando la norma como inconstitucional en una carta conjunta.
La promulgación de la SB4 por parte de Abbott coincide con las declaraciones del expresidente Donald Trump, quien en un mitin prometió la mayor deportación de inmigrantes en caso de regresar a la Casa Blanca en 2025. Esto también lo contamos en este blog.
Trump, conocido por sus políticas migratorias restrictivas, respaldó las acciones de Abbott en la frontera, como enviar autobuses de inmigrantes a ciudades demócratas y la instalación de boyas y alambre de púas en el río Bravo.
Otras medidas de Greg Abbott
Junto con la ley SB4, Abbott firmó otra ley que destina 1,500 millones de dólares a las autoridades locales para fortalecer la vigilancia en la frontera.
Su plan incluye continuar la construcción del muro migratorio y la instalación de más barreras.
En este sentido, un juez federal ordenó recientemente mover las boyas instaladas en el río Bravo, el muro flotante que generó disputas diplomáticas con México.
La tercera ley, que entrará en vigor en febrero, se centra en endurecer las penas para los traficantes de personas.
Abbott argumentó que el aumento en las detenciones por tráfico de personas, pasando de 317 en 2017 a más de 3.000 este año, justifica esta medida.
La nueva normativa eleva las penas para la trata de personas a diez años y establece una pena de cinco años de cárcel para quienes operen o ayuden en la gestión de casas de seguridad utilizadas por cárteles y bandas para alojar a migrantes mientras esperan el pago de sus deudas.
La implementación de estas leyes en Texas plantea preguntas sobre el equilibrio entre la seguridad fronteriza y los derechos humanos.
A medida que la SB4 se prepara para entrar en vigor en marzo de 2024 (le informaremos todos los detalles cuando esto suceda), se espera que las tensiones en torno a estas políticas migratorias alcancen nuevos niveles, con posibles desafíos legales para los abogados de inmigración y debates intensificados sobre el tratamiento de los inmigrantes en Estados Unidos.
Con información de CBS y ACLU of Texas.
Abogados de inmigración
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