La administración del presidente Joe Biden está a punto de resucitar –afirma justsecurity.org– la política de la era Trump sobre la prohibición de tránsito.
Dicha reglamentación –agrega– fue repetidamente anulada recientemente por los tribunales por ilegal.
Señalan que la prohibición de tránsito de Trump que quiere revivir Biden es ilegal
Esta organización asegura a su vez que la nueva prohibición de tránsito “crearía una presunción refutable de inelegibilidad de asilo para las personas que llegan a la frontera sur que no han buscado protección en un país por el que viajaron en su viaje, salvo que cumplan las excepciones que se especificarán”.
También refiere que como respuesta al anuncio de esta política por parte del gobierno de Biden, ha habido una condena por parte de miembros del Congreso, de organizaciones religiosas y de derechos civiles y derechos humanos.
“La nueva prohibición de tránsito violaría las obligaciones de protección de los Estados Unidos hacia los refugiados, que son de larga data y están sólidamente basadas tanto en el derecho internacional como en el nacional. Estados Unidos se adhirió en 1968 al Protocolo de Refugiados, que incorpora las disposiciones sustantivas de la Convención de Refugiados de 1951”, expone justsecurity.org.
Y añade que “con la aprobación por el Congreso de la Ley de Refugiados en 1980, Estados Unidos alineó su estatuto federal de inmigración con las disposiciones de la Convención y el Protocolo sobre Refugiados. La piedra angular tanto del derecho internacional como del nacional es el principio de no devolución, la prohibición de devolver a los refugiados a cualquier país donde su vida o su libertad estén amenazadas”.
“Aunque el estatuto de refugiado de EE. UU. permite la denegación de asilo a quienes pasan por un “tercer país seguro” de camino a los Estados Unidos y no solicitan protección allí, la ley establece dos requisitos no negociables: el país de tránsito no debe ser uno en el que la vida o la libertad del solicitante de asilo se vea amenazada por su raza, religión, nacionalidad, pertenencia a un grupo social en particular u opinión política, y el solicitante de asilo debe tener acceso a un procedimiento “completo y justo”, explica igualmente.
Asimismo, “para determinar las solicitudes de protección (Estados Unidos también debe tener un acuerdo formal con el tercer país). Estas condiciones no se cumplen en los países por los que viaja la mayoría de los solicitantes de asilo en su camino a Estados Unidos”, indica justsecurity.org.
Se la pondrían más difícil a los solicitantes de asilo
Al mismo tiempo, afirma que “la administración de Biden sin duda argumentará que debido a que la regla propuesta impone solo una presunción refutable en lugar de una prohibición total, se distingue de la prohibición legal de Trump y pasará la prueba legal. Pero los hechos sobre el terreno no respaldan ni siquiera una presunción de seguridad y acceso a un procedimiento completo y justo”.
Además –continúa justsecurity.org en su exposición– si se aplica la presunción de inelegibilidad durante las entrevistas de detección de miedo creíble en la frontera, como parte del proceso de deportación acelerada profundamente defectuoso, será muy difícil para los solicitantes de asilo superar el obstáculo que presenta.
“La mayoría de los solicitantes de asilo transitan la deportación acelerada sin un abogado y no poseen un conocimiento detallado de las condiciones de derechos humanos y los procedimientos de asilo en cada uno de los países por los que transitaron para demostrar que califican para una excepción”, refiere.
Incluso destaca que “el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha recomendado específicamente que las decisiones de “exclusión”, que incluirían decisiones como las que se toman sobre la aplicabilidad de la prohibición de tránsito, no se tomen en procedimientos acelerados como la expulsión acelerada”.
Los países de tránsito de los inmigrantes no ofrecen certezas en el acceso a un sistema de protección de refugiados
“Todos los migrantes que llegan a la frontera sur han transitado por México y, dependiendo de su país de origen y ruta, pueden haber viajado por Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica o Panamá antes de llegar a México. Con la posible excepción de Costa Rica, ninguno de estos países de tránsito ofrece la seguridad o el acceso a un sistema de protección de refugiados que justificaría la imposición de la prohibición”, explica también justsecurity.org.
Para que conozcas más sobre estos temas, te recomendamos también un artículo publicado el mes pasado en el Blog de la abogada de inmigración, Erika Jurado, que indica que a través de un nuevo plan fronterizo, el gobierno de Biden permitirá la entrada a EU de hasta 30 mil migrantes de Haití, Venezuela, Cuba y Nicaragua mensualmente, pero endurecerá las restricciones para aquellos que intenten cruzar la frontera con México sin la documentación necesaria.
“La violencia generalizada contra los migrantes en México, llevada a cabo tanto por actores estatales como no estatales, ha sido bien documentada. El informe más reciente sobre las condiciones del país del Departamento de Estado de los EE. UU. señaló la “persecución y victimización” de los migrantes, y al anular la prohibición de tránsito de Trump en julio de 2020, el Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito citó los altos niveles de violencia, incluida la violencia sexual, contra los solicitantes de asilo. buscadores en México”, resalta justsecurity.org.
“Incluso si México fuera seguro, que no lo es, las políticas estadounidenses, como el Título 42, han abrumado su sistema de refugiados, impidiendo el acceso significativo a un procedimiento completo y justo”, agrega.
“Los cuatro países centroamericanos al sur de México (Guatemala, El Salvador, Honduras y Nicaragua) son aún menos capaces de pasar la prueba del tercer país seguro. Los abusos significativos de los derechos humanos , incluidos los asesinatos extrajudiciales, la tortura y las desapariciones, prevalecen en altos niveles en cada país”, indica igualmente.
“Honduras, El Salvador y Guatemala tienen las tasas más altas de feminicidios (asesinatos por motivos de género) en el mundo, así como violencia extrema contra las personas LGBTQ+, mientras que la represión brutal de los opositores políticos al régimen autoritario en Nicaragua está bien documentada”, señala también.
Nueva fase en plan de desarrollo para Centroamérica
Apenas la semana pasada, la vicepresidenta de EU, Kamala Harris, anunció el pasado lunes una nueva fase de su plan de desarrollo para frenar la inmigración procedente de Centroamérica. Se trata de nuevos compromisos con el sector privado que permitirán la inversión de 950 millones de dólares adicionales para crear oportunidades en la región. Te invitamos a que conozcas toda la información al respecto en otro artículo publicado en el Blog de la abogada Erika Jurado.
“Se podría perdonar a la administración Biden si desconociera por completo las condiciones en los países de tránsito, que son evidentemente inseguras o superan la capacidad. Pero la falta de conocimiento no es el caso, lo que hace que las acciones de la administración sean aún más deplorables”, afirma justsecurity.org.
“Con la implementación planificada de su propia versión de una prohibición de tránsito, Biden está dispuesto a externalizar las obligaciones de protección de EE. UU. a países como Costa Rica, que ya están abrumados por una tasa desproporcionadamente alta de solicitudes de asilo per cápita, o como alternativa, regresar aquellos que huyen de la persecución a situaciones tan violentas como aquellas de las que han huido”, asegura.
Respalda el presidente de México más apoyos para Centroamérica
“La paz es fruto de la justicia, los problemas sociales no se resuelven sólo con medidas coercitivas, debemos siempre atender el flagelo de la violencia y el fenómeno migratorio con un enfoque humanitario y de oportunidades para el bienestar”, aseguró el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador durante su mensaje en la X Cumbre de Líderes de América del Norte, el pasado 10 de enero, en el que estuvo acompañado del presidente de Estados Unidos, Joe Biden y del Primer Ministro de Canadá Justin Trudeau.
En este sentido, y tras un encuentro privado entre los tres líderes norteamericanos, el presidente mexicano destacó que “nosotros lo hemos constatado en México, también en los pueblos hermanos, en los países de Honduras y El Salvador. Por ejemplo, como en nuestro país ya no se permite la corrupción y el presupuesto se destina al desarrollo, y a apoyar a los más pobres, ahora no sólo hay empleos, ha bajado la violencia, es menos la migración; también se ha atemperado la frustración y permanece encendida la llama de la esperanza”.
Desde el Palacio Nacional en la Ciudad de México, López Obrador añadió que “el caso de Centroamérica es excepcional. Con muy pocos recursos ayudamos a productores de comunidades en Honduras y El Salvador para que siembren sus tierras y cuenten con asesoría técnica, sustento e ingresos básicos”.
“Que la migración sea opcional, no forzosa; en tanto logramos eso, porque no quitamos el dedo del renglón, México, con pocos recursos está ayudando en Honduras, El Salvador; empezaremos en Guatemala, en Belice, pero necesitamos impulsar más el desarrollo y el bienestar para garantizar oportunidades a quienes se ven obligados a emigrar de sus comunidades”, enfatizó el líder mexicano a quien le faltan menos de dos años de gobierno.
Aquí puedes consultar el artículo completo sobre esta cumbre entre los líderes de México, Estados Unidos y Canadá, en la que se tocaron también los temas de inmigración.
Que el gobierno de Biden asuma sus responsabilidades y escuche a congresistas y organizaciones
“Pero más allá de la locura legal de resucitar la prohibición, está la vergüenza que debería sentir esta administración cuando repudia sus obligaciones internacionales y nacionales, trata de descargar sus responsabilidades en países más pequeños con muchos menos recursos y abandona no solo a los refugiados que buscan protección, sino a los suyos propios. alto terreno moral”, explica.
“Uno solo puede esperar que la administración de Biden preste atención al llamado de los legisladores, líderes religiosos y grupos comunitarios para reconsiderar su plan de imponer una prohibición de tránsito. Si no lo hace, puede anticipar una crítica sostenida a lo largo del período de notificación y comentarios, y más allá”, señala por último la organización.
Pos supuesto que es inaceptable que, como dice justsecurity.org, Estados Unidos trate de transferir sus responsabilidades a países con muchos menos recursos y que más bien necesitan de su apoyo. Por tal motivo, nos sumamos a su llamado para que la administración actual reconsidere “su plan de imponer una prohibición de tránsito”.
Esperemos que así lo haga, porque no olvidemos que un mejor resultado en este sentido, escuchando a los legisladores y organizaciones religiosas y pro derechos de inmigrantes, sólo beneficiará, finalmente, a estos refugiados que huyen de sus países por violencia o hambre y que lo único que buscan son oportunidades de trabajo para ofrecerles a sus familias un futuro mejor.
Por cierto, te recordamos que desde finales del mes pasado, ciudadanos estadounidenses o residentes ya pueden presentar solicitudes de patrocinio y ayudar a refugiados a adaptarse a sus nuevas vidas en Estados Unidos, esta información también la puedes consultar en el Blog de la abogada Jurado.
Con información de justsecurity.org.
Si tienes una situación migratoria complicada y quieres resolverla con alguien de confianza, con experiencia y paciencia, no dudes en agendar una cita con el equipo de la abogada Erika Jurado. ¡Nos enfocamos en todo tipo de casos migratorios y tenemos licencia para trabajar en todos los Estados Unidos!
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