En los últimos meses, cada vez más personas preguntan si es mejor optar por el proceso de regularización a través de la sección 245i (o Ley 245i) o por la Visa U.
Esta duda surge especialmente ahora que aquellos que presentaron sus solicitudes antes del 30 de abril de 2001 están viendo avanzar sus casos después de años de espera.
La incertidumbre es común, ya que estos solicitantes, en su mayoría, buscan la forma más rápida y segura de obtener la residencia permanente en los Estados Unidos.
La sección 245i: un camino largo
La sección 245i del Acta de Inmigración y Nacionalidad permite que ciertas personas elegibles que han estado presentes ilegalmente en los Estados Unidos ajusten su estatus a residente permanente sin tener que salir del país. Hablamos esta misma semana del tema de la ley 245i.
Esta sección es aplicable principalmente a quienes presentaron sus solicitudes antes del 30 de abril de 2001. Sin embargo, debido a la alta demanda, el proceso es extremadamente lento, particularmente para ciudadanos mexicanos en ciertas categorías familiares, como hermanos o hijos mayores de 21 años de ciudadanos estadounidenses.
La espera puede extenderse hasta 23 años, y no estamos exagerando.
Durante este largo período de espera, muchas personas han buscado otras vías para regularizar su estatus, y algunos encuentran en la Visa U una opción viable para aquellos que han sido víctimas de ciertos crímenes y han colaborado con las autoridades en la investigación o persecución de estos delitos.
Es aquí donde surge la duda: ¿deberían seguir esperando bajo la 245i o intentar el camino de la Visa U?
Visa U: un perdón generoso pero lento
La Visa U está diseñada para proteger a las víctimas de crímenes que han sufrido abuso físico o mental y que están dispuestas a ayudar a las autoridades en la investigación o persecución de actividades delictivas.
Una de las grandes ventajas de la Visa U es que ofrece un perdón amplio para numerosas violaciones migratorias y antecedentes penales, algo que la 245i no proporciona.
Sin embargo, el proceso de obtención de la Visa U también es largo. En sus inicios, el tiempo de espera era relativamente corto, pero actualmente, debido al número de solicitudes, el tiempo estimado de espera es de aproximadamente 19,5 años solo para obtener la Visa U, sin contar el tiempo extra necesario para alcanzar la residencia permanente.
Qué debo saber para tomar la decisión
-Elegibilidad y admisibilidad:
Si bien la 245i permite ajustar el estatus a aquellos que han estado presentes ilegalmente, no resuelve otras formas de inadmisibilidad. Si el solicitante principal o sus familiares derivados tienen problemas serios de elegibilidad, como una declaración falsa de ciudadanía estadounidense, antecedentes penales o deportaciones previas, la 245i puede no ser la mejor opción. En estos casos, la Visa U ofrece un perdón más amplio y puede ser más conveniente.
-Familiares derivados:
En la mayoría de los casos, la Visa U permite que los familiares directos, como cónyuges e hijos menores, sean incluidos en la solicitud y también obtengan el estatus legal. Si el solicitante principal decide ajustar su estatus a través de la 245i, sus familiares derivados pueden quedar fuera del proceso de la Visa U, perdiendo la oportunidad de regularizar su estatus.
-Edad de los hijos:
Para aquellos con hijos que se acercan a los 21 años o que ya los han cumplido, es importante considerar cómo esto afectará su elegibilidad. Bajo la 245i, los hijos que superan esta edad no pueden ser incluidos como derivados, mientras que en la Visa U, siempre y cuando la solicitud se haya presentado antes de que cumplieran 21 años, siguen siendo elegibles.
245i vs Visa U: posibles problemas
Aunque la 245i puede parecer una vía más rápida hacia la residencia permanente, es importante evaluar todos los posibles obstáculos.
Las reglas de admisibilidad bajo la 245i son mucho más estrictas en comparación con la Visa U.
Además, situaciones específicas como el castigo permanente o ciertas violaciones migratorias pueden complicar el ajuste de estatus bajo la 245i.
Asesoramiento legal: un paso clave
Ante la complejidad de estas decisiones, es esencial que los solicitantes busquen el consejo de un abogado de inmigración con experiencia en ambos tipos de trámites.
No todos los abogados tienen el mismo nivel de conocimiento sobre la 245i, y un mal asesoramiento puede llevar a decisiones que afecten negativamente a toda la familia.
Por eso, es vital contar con un profesional que pueda evaluar individualmente cada caso y proporcionar una orientación adecuada.
Para aquellos que se encuentran decidiendo sobre esto, la recomendación es clara: antes de tomar un camino, consulte con un abogado de inmigración que tenga un profundo conocimiento de la 245i y la Visa U.
Solo así se podrá asegurar que la elección hecha sea la más beneficiosa para todos los miembros de la familia, evitando sorpresas desagradables y asegurando un futuro más seguro y estable en los Estados Unidos.
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