La administración de Biden presentará una serie de ajustes en el sistema de asilo en Estados Unidos.
El anuncio se concretaría este jueves 16 de mayo, según publican Político y otros medios estadounidenses, habiendo consultado a distintas fuentes de la Casa Blanca.
Estos cambios en el sistema de asilo se enfocarán en el momento en que se determina la elegibilidad de los inmigrantes para solicitar y recibir asilo.
Es decir, mientras que ahora esta evaluación se realiza durante la etapa de las entrevistas, la nueva propuesta de la administración Biden busca aplicar estos criterios antes, desde el inicio del proceso de selección.
Esta modificación podría agilizar la expulsión de aquellos migrantes que las autoridades consideren potencialmente no elegibles para permanecer en el país debido a razones de seguridad nacional o pública.
Cambios en el sistema de asilo
Fuentes cercanas a la administración Biden, que solicitaron el anonimato para hablar abiertamente sobre estos planes, le dijeron a los periodistas que el Departamento de Seguridad Nacional anunciará esta nueva política el jueves 16 de mayo. ¿Será así? Estaremos a la expectativa.
Aunque no se espera que este anuncio incluya cambios estructurales en la política migratoria, como la utilización de una sección de la Ley de Inmigración y Nacionalidad para restringir el acceso al asilo, sí se podrían esperar más ajustes a partir de junio.
Hay mucho por hacer en materia de inmigración en Estados Unidos y parece que estos meses antes de las elecciones serán importantes.
Presión por las elecciones
El presidente Biden tiene presiones internas en su partido para que tome medidas en la frontera, especialmente tras el fracaso del plan bipartidista de inmigración en el Senado a principios de año. De ese tema te contamos en este blog, ¿recuerdas?
Desde hace meses, la Casa Blanca evalúa el momento oportuno para implementar nuevas acciones ejecutivas y regulaciones federales con el objetivo de contrarrestar la ventaja electoral que tiene Donald Trump en temas de frontera e inmigración tras el fracaso del acuerdo fronterizo.
Se espera que el anuncio de este jueves no genere la misma reacción en la izquierda que provocaría una prohibición de asilo.
Sin embargo, algunos defensores de la inmigración muestran preocupación por los problemas que podría enfrentar la administración en la implementación de esta nueva normativa.
Los agentes de asilo ya enfrentan dificultades para realizar pruebas de detección de credible fear (miedo creíble) en un tiempo razonable, y esta nueva política podría aumentar la presión sobre ellos, lo que podría resultar en un retraso aún mayor en el proceso.
Además, algunos están preocupados por si los inmigrantes tendrán suficiente tiempo para buscar asesoramiento legal en abogados de inmigración antes del examen preliminar, y si recibirán una representación legal adecuada según lo estipulado en la normativa propuesta.
Asilo: cambios necesarios
La gestión del gobierno de Biden en cuanto a la inmigración en la frontera está siendo fuertemente cuestionada por los ciudadanos estadounidenses, sin importar su afiliación política. Incluso entre los hispanos, la opinión es muy negativa.
Así es, según un estudio realizado en enero de 2024 por Pew Research Center, el 80% de los estadounidenses considera que el gobierno está desempeñando un papel deficiente en la frontera, marcando un fuerte aumento desde el 65% registrado en 2019.
No hay distinciones políticas en esto: tanto demócratas como republicanos expresan descontento con la incapacidad del gobierno para abordar la situación.
Casi el 90% de los republicanos y más de tres cuartas partes de los demócratas coinciden en que el gobierno de Biden no ha logrado resolver el problema.
Esto es lo que se está viendo: el incremento en el número de migrantes que buscan ingresar a Estados Unidos a través de la frontera con México ha sobrecargado los recursos gubernamentales, ha generado divisiones en el Congreso y se ha convertido en un tema candente en la campaña presidencial de 2024.
En el caso de la comunidad hispana, la encuesta revela una fuerte insatisfacción con la Administración Biden.
Tres de cada cuatro hispanos opinan que el gobierno está fracasando en la gestión de la frontera, y el 91% considera que la crisis fronteriza es un problema para el país.
El 38% de los hispanos califica como muy deficiente el trabajo de Biden en la crisis fronteriza, mientras que el 36% lo considera algo deficiente y solo el 26% lo evalúa como “algo bueno”.
Además, un 28% de los hispanos muestra interés en seguir las noticias relacionadas con la frontera entre Estados Unidos y México.
Entre tanto, el 47% de los latinos señala que la inmigración ilegal está contribuyendo a un aumento de la delincuencia en Estados Unidos.
Con información de Político, Pew Research Center, WJACTV, Axios y AP.
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