Algunos trámites realizados en la Oficina de Ciudadanía y Servicios de Inmigración (USCIS) duplicaron o hasta triplicaron el tiempo de respuesta lo que ha originado miles de demandas en tribunales civiles para obligar al gobierno del presidente Joe Biden a agilizar los procesos.
USCIS y otras oficinas enfrentan miles de demandas por demoras en trámites
USCIS admitió a finales de marzo pasado que había “acumulado un número significativo de casos pendientes” y anunció medidas para reducir los plazos en solicitudes de ajuste de estatus (residencia legal permanente), peticiones de ciudadanía por naturalización, permisos de trabajo, y renovaciones de DACA, y Estatus de Protección Temporal, (TPS) entre otros trámites que gestiona dicha agencia.
En aquel momento se informó que USCIS tenía acumulados más de 9.3 millones de casos en espera de ser resueltos.
Por no tomar medidas en una variedad de solicitudes relacionadas con la inmigración –revela un informe elaborado por el Centro de Información y Acceso de Registros Transaccionales (TRAC en inglés) de la Universidad de Syracuse– el gobierno de Biden se enfrenta a una serie de demandas.
Y señala que hasta mayo pasado, los tribunales civiles federales registraron 647 demandas relacionadas con inmigración por un recurso legal conocido como “writs of mandamus”, un tipo de demanda que busca obligar al gobierno a tomar una acción legal.
Exige TRAC a autoridades de migración tomar acciones
A su vez, el reporte de TRAC le exige tomar otras acciones de inmigración, “la gran mayoría de las cuales estaban vinculadas a demoras procesales o decisiones por parte del Departamento de Seguridad Nacional (DHS)”, bajo cuyo mando opera la USCIS.
El análisis del TRAC descubrió que el número de demandas entabladas contra el gobierno “es el mayor de tales casos presentados en un solo mes (647 en mayo) desde al menos octubre de 2007, año en que TRAC comenzó a tener datos al respecto.
Los investigadores de la Universidad de Syracuse alertan de que a este paso, los tribunales verán 6 mil 276 casos de este tipo para fines de este año fiscal que culmina el 23 de septiembre, un aumento de casi dos mil casos frente a las 4 mil 347 demandas del año fiscal 2021.
El sistema de inmigración estadounidense –resalta una nota de Jorge Cancino en univision.com– se basa en una amplia variedad de solicitudes y otros documentos sobre los que se debe actuar, generalmente emitiendo una aprobación o denegación de un caso o petición. Eso incluye solicitudes que son decididas por jueces de inmigración, empleados de USCIS o del Departamento de Estado (DOS).
El periodista de Univisión también refiere que a inicios de este mes se reportó que 9.2 millones de extranjeros residentes legales permanentes (LPR) que viven en la Unión Americana califican para pedir la ciudadanía por naturalización (Formulario N-400), pero que el trámite para conseguirlo demora en promedio 14.6 meses.
Y agrega que a finales de 2016 dicho trámite tenía un tiempo de espera de entre 4 y 6 meses, pero que debido a “las duras políticas migratorias adoptadas durante el gobierno de Donald Trump en el marco de su política de ‘tolerancia cero’ y el cierre de oficinas por la pandemia del coronavirus a partir de marzo de 2020, las demoras en el procesamiento de solicitudes se triplicó”.
Los tiempos de procesamiento de casos en USCIS han aumentado
El informe del TRAC subraya que en los últimos años los tiempos de procesamiento de los casos en USCIS han aumentado considerablemente, “lo que ha llevado a muchos inmigrantes a esperar períodos prolongados para saber si se aprobará su documentación”.
Y advierte sobre que “para algunos solicitantes, las demoras en las agencias gubernamentales podrían significar que una persona fuera de los Estados Unidos deba esperar para reunirse con sus familiares dentro del país o que una persona dentro del país tenga que vivir en un limbo legal durante meses o años mientras espera un resultado”.
En otros casos, los retrasos en la USCIS “significan esperar la autorización de trabajo u otros trámites que pueden requerir poco más que una firma superficial, pero que impiden que la persona trabaje y participe plenamente en la sociedad”.
El estudio indica que las demandas “pueden acelerar la obtención de una decisión sobre su solicitud, pero esa decisión bien podría ser la denegación del trámite. No hay garantía de que sea aprobado”.
Pero USCIS no es la única agencia nombrada en las demandas
Según el TRAC en los recursos legales presentados ante los tribunales de justicia se incluye el nombre de la directora del servicio de inmigración, la abogada Ur Mendoza Jaddou, así como el secretario del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), Alejandro Mayorkas, el fiscal general Merrick Garland, quien supervisa las Cortes de Inmigración, e incluso los directores regionales de USCIS.
En marzo Mendoza Jaddou dijo que la agencia “sigue comprometida a brindar decisiones oportunas y justas a todos a los que servimos”.
Y que “cada solicitud que adjudicamos representa las esperanzas y los sueños de los inmigrantes y sus familias, así como sus necesidades críticas inmediatas, como la estabilidad financiera y la protección humanitaria”, refiere la nota de univision.com.
Acude abogada Erika Jurado a la Conferencia Anual de Inmigración
Más recientemente, en junio pasado, la abogada Erika Jurado acudió a la Conferencia Anual de Inmigración en la que la directora del USCIS estuvo presente y reportó para ustedes que la actual administración estaba “tratando de mover todo eso que dejó atorado la administración anterior y habló de las prioridades para el Departamento de Inmigración para tratar de desatorar todo lo que se encuentra torado”.
“Parte de esas prioridades de las que habló (la directora Mendoza Jaddou) son, por ejemplo, fortalecer al Departamento de Inmigración que están bajos en personal y si te estás preguntando porque se está tardando tanto tu tarjeta de trabajo, es porque apenas tienen 20 por ciento de eficiencia en la gente que necesitan contratar”, contó la abogada.
“Y mientras no incrementen el número de personas están trabajando, habrá retrasos, así que hay una solicitud masiva para contratar en USCIS”, indicó la abogada el pasado 16 de junio durante una transmisión en vivo desde Nueva York.
USCIS requiere de más presupuesto para terminar con retrasos
Explicó también que todos los servicios de USCIS se basan en las cuotas que paga el aplicante y que “con estos programas que de repente han tenido que implementar como el refugio para afganos o ucranianos y parte de los asilos que se están decidiendo en la frontera, les están quitando un presupuesto a las aplicaciones en donde paga el aplicante, y se lo está mandando a otros tipo de proceso y pues eso no es justo”.
Por ejemplo, mencionó que “para una persona que está solicitando la residencia y que tiene que esperar dos años para la residencia porque no hay quien las procese, Ur quiere que el Congreso le invierta más en dinero al USCIS, para que esos programas humanitarios tengan su propio presupuesto y no quitarle el presupuesto a los casos donde las personas pagan por su aplicación”.
La abogada contó también que Mendoza Jaddou recordó que “ya hace bastante tiempo que no se han incrementado las cuotas y que se está revisando la manera de reestructurar las cuotas para que ellos puedan tener mejor y más presupuesto para que los casos se resuelvan a tiempo”.
USCIS sigue comprometida con los soñadores
De igual forma, indicó que USCIS –según las palabras de su titular– sigue comprometida con todos los soñadores para renovarles los permisos de trabajo, para renovarles la solicitud de la Acción Diferida.
Esperemos que por bien los inmigrantes, para que reciban cuanto antes los beneficios migratorios a los que tienen derecho, para que puedan trabajar sin tener ningún problema con sus empleadores, para que puedan tener una tarjeta de residencia o iniciar ese trámite que los mantendrá más tranquilos viviendo y buscando el sueño americano en Estados Unidos.
